Ayer 13 de Septiembre Cristian cambió toda su vida de soltero por una “Paloma”. Fue una boda muy bonita, con muchos invitados, familiares y amigos. La ceremonia se celebró en la iglesia de Covadonga con una gran afluencia de personas. Después de la misa, en la que mútuamente se prometieron fidelidad eterna, nos fuimos al restaurante “Lobato”, donde celebramos el banquete, espléndido, a base de marisco, pescado y carne, todo de primera calidad. Después vino el baile. Los novios lo abrieron con el clásico vals nupcial (vals nº1 de Prokofiev), después, todos los invitados e invitadas bailaron incansablemente hasta las 10 de la noche, hora para reponer fuerzas con un lunch formidable y riquísimo, también protagonizado por el marisco. Luego se cantó el cumpleaños feliz al novio, ya que cumplía 29 añitos después de las 12 de la noche. Se recordó su vida con un precioso pase de diapositivas desde su nacimiento hasta este maravilloso día de su boda. Después, muchos regalos de sus amigos, más baile y despedida cariñosa y emotiva de todos los invitados, deseándole la mayor felicidad junto con su esposa...hasta que la muerte los separe.
Marcelino
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